El PNV ha advertido de que, si se hace permanente el impuesto a banca y energéticas, tal como han propuesto el PSOE y Sumar en su acuerdo para reeditar el Gobierno de coalición, tendrá que respetarse la autonomía del Concierto Económico vasco y el convenio navarro.
Este punto es la condición previa que el grupo pone a los socios de Gobierno para dar su sí a hacer permanentes estos tributos. Y es que, precisamente, los vascos critican que los impuestos no son tributos al uso, sino "prestaciones patrimoniales no tributarias". "Esto impide su concertación al Concierto Económico Vasco", señalan fuentes nacionalistas a Europa Press.
En plenas negociaciones para conformar un nuevo Gobierno de coalición entre PSOE y Sumar, que necesita del sí de los vascos, el PNV quiere dejar claro que los tributos han de adaptarse para que puedan ser gestionados en Euskadi y Navarra. "Habrá que ver qué fórmula se utiliza para su prórroga y en qué se concreta", apostilla el partido.
El impuesto a las energéticas
Ya en la aprobación de los impuestos, donde los vascos lograron introducir enmiendas para excluir los ingresos regulados de las energéticas del tributo, el PNV aseguró que compartía el fondo de la iniciativa, pero no el diseño y el procedimiento legislativo.
En este plano los nacionalistas vascos decidieron finalmente abstenerse cuando se aprobaron los impuestos en el Congreso, pero avisaron que el diseño era "deficiente".
El sector bancario y energético se considera de especial relevancia para la formación, ya que el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, fue precisamente presidente del partido. Además, el BBVA tiene su sede en Bilbao.
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