La ofensiva china es imparable y dentro de ella hay una marca que quiere liderarla: BYD. Si bien el otrora productor de baterías reconvertido el mayor fabricante de coches eléctricos del mundo ya ha cimentado su portfolio de productos con modelos de corte más generalista que aquí os traeremos dentro de poco, realidad es que ha empezado la casa por el tejado. Porque junto con el Tang que ya analizamos aquí, uno de los primeros BYD en llegar ha sido este Han que hoy en El Periódico de la Energía vamos no solo a probar en profundidad sino que además vamos a ver si es el mejor coche chino que existe en la actualidad.
VÍDEO| Prueba del BYD Han: lujo asiático
El torrente de vehículos chinos sigue siendo imparable pero pocos apuntan tan alto como este BYD Han que hemos probado en profundidad
Hasta ahora hablar de coches chinos era hacerlo o bien de modelos pobretones o de excentricidades sin sentido. Pero BYD ha sabido entender las necesidades del público europeo en lo que a lujo se refiere y ha puesto todo su know how para desarrollar el que es sin duda su portaestandartes, su buque insignia. Tanto es así que el Han es capaz de rivalizar con modelos europeos de corte premium pero con ese componente 100% eléctrico que, hasta ahora, solo presentaba Tesla con el Model S, rival por cierto, directo de este Han.
Quizá le venga grande enfrentarse a coches como el BMW i7 (prueba) o el Mercedes-Benz EQS pero si bajamos ligeramente un escalón y nos vamos a los i5 o EQE (prueba), este Han no tiene demasiado que envidiarles. E incluso si como haremos más adelante, hablamos de rendimiento, podríamos incluso meter en la coctelera a los Audi e-tron GT (prueba del RS) y Porsche Taycan. Con todo, el Han es un coche grande, muy grande, que mide 4,99 metros de largo por 1,91 de alto y 1,5 de alto, cotas englobas en un diseño sobrio pero elegante en el que los diseñadores se han esmerado por ofrecer una silueta a favor del viento como demuestra un coeficiente Cx de solo 0.23, gracias, entre otros, a los tiradores enrasados, a la caía del techo o a un paragolpes delantero y un difusor trasero muy trabajados.
Si nos vamos a los detalles estéticos nosotros resaltaríamos un frontal limpio y anguloso con esta forma deportiva de los paragolpes, la parrilla carenada y la tira cromada que conecta los pilotos delanteros y en la que se incrusta el logo BYD. Las llantas que solo tienen un tamaño, 19 pulgadas y que se montan sobre neumáticos de corte deportivo como son estos Michelin Pilot Sport 4S. La moldura del pilar C, cromada igualmente, que aporta un toque diferenciador y, para mí,enfatiza la deportividad; la tira de LED posterior que conecta los pilotos traseros y que le aporta distinción cuando circulamos de noche. Por último, un detalle curioso es que bajo el nombre del modelo, en el portón, se coloca este 3.9s que no hace sino referirse al tiempo que tarda este Han en pasar de 0 a 100 km/h, toda una declaración de intenciones.
No se priva de (casi) nada
De puertas para dentro, el Han destierra todo el estereotipo de que lo chino está mal hecho o ha de ser barato. Ya lo vimos no solo en el Tang sino igualmente en el Atto3 pero como buen portaestandartes, el punto de exclusividad que aporta este Han es mucho mayor. Los materiales y el ensamblaje de los mismos son perfectos así como la combinación de colores, sobria a la par que elegante. Los asientos tapizados en cuero Nappa aportan confort, cuentan con calefacción y ventilación, mientras que la luminosidad está asegurada con el techo solar panorámico.
Si hablamos de digitalización la gran pantalla central de 15,6 pulgadas se convierte en el cerebro de operaciones proponiendo, eso sí, el mismo sistema multimedia visto en otros BYD con la salvedad de que en este modelo no se puede girar. Lo bueno, que su manejo es rápido y fluido, mientras que en el lado negativo no solo tenemos que controlar funciones como el climatizador sino que para encontrar algunas utilidades tenemos que navegar en infinitos sub-menús. Eso sí, ofrece sincronización con Apple CarPlay y Android Auto aunque mediante cable. Otro detalle que nos ha gustado, que al igual que el Tang, el cuadro de instrumentos es funcional. Tiene una pantalla de 12,3 pulgadas con varios menús y vistas informativas así como con la posibilidad de configurarlo en dos vistas. Para completarlo, por encima se sitúa un Head-up display que, aquí sí, es menos completo que el de sus rivales.
Clase Business
Ahora bien, hablamos de un coche de representación y como tal la zona más destacada es la trasera porque aquí no solo gozamos de un amplísimo espacio para los ocupantes, digno de una berlina de representación de estas dimensiones sino que tenemos todos los elementos de confort a nuestro alcance. Comenzando por un sistema de sonido firmado por Dynaudio con 12 altavoces y subwoofer, siguiendo por la posibilidad de reclinar los respaldos traseros y finalizando por un sistema de climatización trizona con purificador de aire.
“"En la zona trasera gozamos de un amplio espacio, así como de una pantalla central para controlar varias funciones"
Pero ojo, porque si no te quieres mover demasiado, en el reposabrazos central no solo tenemos dos posavasos sino que también contamos con una pantalla de 7 pulgadas que nos permite manejar todas estas funciones ya descritas así como controlar la cortinilla del techo y el sistema de iluminación ambiental. Por último, si ocupas la plaza dela derecha, a través de unos comandos situados aquí en el lateral, podrás desplazarla butaca para contar con todo el espacio del mundo.
Todo lo contrario ocurre con el maletero que resulta bastante justo para un coche de estas dimensiones. Cubica solo 410 litros que, para que te hagas una idea son 80 litros menos que un BMW i5 y, ojo, casi 300 menos que un Model S… y eso en la zona trasera pues el californiano suma otros 89 bajo en el capó, no como el Han que solo cuenta con este hueco La ventaja, que bajo el piso hay un hueco para dejar los cables de carga.
En marcha sorprende
Llegados a este punto toca conducir y qué nos encontramos en este Han, pues rendimiento a raudales porque gracias a los dos motores eléctricos, situados uno en cada eje (hablamos por tanto de un modelo de tracción total), la potencia máxima es de 517 CV a lo que acompaña de un par máximo de 700 Nm. Con estas cifras no es de extrañar que tengamos ese 0 a 100 km/h de 3,9 segundos, mientras que la punta de velocidad es de 180 km/h.
“"Declara 517 CV de potencia y tiene un 0 a 100 km/h de solo 3,9 segundos"
Estos dos motores se alimentan de la energía almacenada en la ya conocida Blade Battery de BYD con una composición química a base de litio ferro-fosfato (la denominada LFP) con una capacidad útil de 85,4 kWh con la que homologa una autonomía máxima de 521 km a razón de 18,5 kWh/100 km. Un consumo y una autonomía cuanto menos irreales porque en ningún caso lograrás bajar de los 20 kWh/100 km, de hecho nosotros estamos en 21,3 kWh/100 km lo que se transforma en unos 400 km de autonomía real, que no está mal. Además, para mantenerla más o menos constante, cuenta con una efectiva bomba de calor que nos permite conectar el A/C o la calefacción desde el primer instante sin reducir el rango final.
La ventaja de esta batería es su menor degradación y la posibilidad de mantener una potencia de carga lineal, pero en su contra está la menor densidad energética que provoca que la potencia de carga sea más justa que otros rivales. Así en CC admite conexiones máximas de 120 kW y en CA, de 11 kW, necesitando entre 45 minutos y 8 horas para llenarla, respectivamente. Otra ventaja, es que posee la tecnología de carga bidireccional y para ello se administra una regleta en la que conectar varios dispositivos que recibirán hasta 3 kW de potencia para funcionar.
“"Dinámicamente prefiere la autopista a una carrertera revirada"
En lo referente al comportamiento, pocos peros y muchos pros. Cierto es que uno espera un coche deportivo con este rendimiento pero la realidad es que al Han no le encanta trazar curvas. Aquí, a diferencia de otros rivales, no contamos con un sistema de suspensión adaptativo aunque el filtrado del que lleva de serie es más que satisfactorio. Sí disponemos de tres modos de conducción: ECO, Normal y Sport que varían la respuesta de manera considerable. También hay dos niveles de retención de la frenada, Standard y High que, como ya hemos visto en otros BYD no son del todo efectivos pero nos ayudan a recuperar la carga.
Aquí quizá le achaques algo menos de exclusividad en el rodar, sobre todo comparado con los modelos alemanes, pero en líneas generales el tacto es muy agradable. Además, los frenos, firmados por Brembo, responden a las mil maravillas, mientras que los asistentes de conducción son numerosos y están bien calibrados.
En definitiva
Llegamos al final confirmando lo que sabíamos**: lo chino ya no es sinónimo de cutre**, menos viendo este BYD Han que ha pasado por nuestras manos y con el que podemos asegurar que estamos ante una de las mejores berlinas electricas del momento. Quizá podía ser menos sobria u ofrecer versiones con menos potencia y más autonomía pero la realidad es que en conjunto este coche es extraordinario.
Como también lo es su precio porque si bien para muchos pagar los 69.990 euros quizá resulte una salvajada, la realidad es que pocos rivales te dan tanto equipamiento por un precio tan ajustado. Si quieres algo más de distinción tienes la versión Emerald Edition con un color de carrocería o un tapizado exclusivos que ya cuesta 73.620 euros. Vuelvo a repetir que son precios a priori altos pero si los comparamos con los de los rivales antes mencionados, en todos los casos este Han es siempre el más barato, económicamente hablando y te digo que en la mayoría de los casos el ahorro es superior a los 30.000 euros si lo equiparamos, claro está en rendimiento.
Galería de imágenes del BYD Han AWD Executive
No hay comentarios
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios