6 comentarios publicados La Unión Europea ha vuelto a encender la vela de la polémica en torno a política energética a largo plazo. La propuesta de la Comisión Europea de establecer un objetivo de energías renovables para 2040 ha generado tensiones entre los países miembros, especialmente entre aquellos que defienden la energía nuclear como pieza clave en la transición hacia una economía libre de carbono.
Durante la celebración del Consejo de Energía de este lunes en Bruselas, el nuevo comisario europeo de Energía, Dan Jørgensen, dejó claro que la Comisión no planea incluir la energía nuclear en el nuevo objetivo específico de renovables. Ante este anuncio, Francia y otros 11 países miembros, junto con tres observadores — todos miembros de Alianza Nuclear—, manifestaron su inquietud a Jørgensen.
Ebba Busch, ministra de Energía de Suecia, cuestionó el hecho de centrarse exclusivamente en las renovables en lugar de un objetivo más amplio de energía limpia. “¿Es más importante establecer un objetivo para renovables y jugar con las estadísticas cerrando plantas nucleares, o centrarnos en una producción sin combustibles fósiles y limpia?”, preguntó retóricamente.
Y aunque Jørgensen mostró cierta disposición a dialogar, su postura no satisface por completo a los defensores de la energía nuclear. En palabras de Pannier-Runacher, el comisario dejó claro que las políticas de la UE deben formularse de manera que no perjudiquen el uso de tecnologías limpias adicionales como la nuclear, pero insistió en que las metas de renovables y nucleares deben mantenerse separadas.
“No nos dio garantías concretas sobre la integración de la nuclear en el objetivo de 2040”, admitió la ministra francesa. Sin embargo, subrayó que la reunión sirvió para expresar las preocupaciones del bloque pro-nuclear y abrir la puerta a debates más profundos.
Posiciones encontradas
El choque de posiciones no es nuevo. Países como Alemania y Austria han adoptado una postura firme contra la inclusión de la nuclear en los objetivos energéticos. Alemania cerró sus últimas plantas nucleares este año, mientras que Austria se opone categóricamente a la tecnología por motivos de seguridad y medioambientales.
Por otro lado, Francia y varios países de Europa del Este, que planean expandir sus reactores, defienden la nuclear como una herramienta clave para descarbonizar la economía.
Punto medio
En sus declaraciones a la prensa tras el Consejo de Energía, el comisario europeo Dan Jørgensen reiteró su postura de mantener separadas las metas para energías renovables y nucleares en los objetivos de la UE. “No creo que mezclar renovables y nuclear en un único objetivo sea una manera sensata de proceder. Creo que debemos mantener las definiciones que ya tenemos en nuestro objetivo renovable al establecer nuevas metas”, afirmó.
Sin embargo, Jørgensen destacó la importancia de formular políticas que no obstaculicen el uso de otras tecnologías limpias y neutrales en carbono, como la nuclear. “Es esencial diseñar las estrategias de manera que no perjudiquen la posibilidad de usar tecnologías como la nuclear para alcanzar los objetivos climáticos”, añadió, reconociendo el papel complementario de esta fuente de energía en la transición energética europea.
Miguel
17/12/2024