El subdirector general de Energía Eléctrica del Ministerio para la Transición Ecológica, Santiago Caravantes, abandonó la tarde de ayer su despacho en el Paseo de la Castellana dónde aún se mantiene la organización de la Secretaría de Estado de Energía.
Caravantes, funcionario del Cuerpo de Ingenieros Industriales del Estado, llegó a la Subdirección en abril de 2012 tras la llegada del PP al Gobierno y con José Manuel Soria a cargo del Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
Ha sido uno de los mayores defensores del denominado 'impuesto al sol' o peaje de respaldo en las instalaciones de autoconsumo. Allá en cada jornada que iba invitado lo defendía a capa y espada y era conocido en el sector como uno de los azotes de las energías renovables. "Un antirrenovables en toda regla", dicen fuentes del sector.
Anteriormente trabajaba justo en eso en el desarrollo de las energías renovables, cogeneración y residuos.
Llegó a la Subdirección justo cuando el Partido Popular llevó a cabo la reforma del sector eléctrico que acabó con el déficit de tarifa a base de grandes recortes sobre todo a las renovables.
En su haber está el reglamento que desarrollaba el impuesto al sol y que nunca llegó a ver la luz. Un texto por el cuál las distribuidoras iban a poder cobrar el peaje de respaldo, algo que no ha sucedido porque no lo quisieron aprobar ni Soria ni Nadal y mucho menos Teresa Ribera.
Ahora que el impuesto al sol es historia tras el RDL aprobado por el Gobierno socialista, Caravantes abandona su puesto en la Subdirección. De momento se desconoce su sustituto aunque tendrá que ser otro funcionario de carrera.
Jorge García
09/10/2018