VÍDEO| Prueba del DS 7 E-TENSE 4x4 360: le président

Tras volver a la vida de la mano de Citroën, DS Automobiles decidió escoger su propio camino siendo el DS 7 Crossback el primer modelo que anunció. Hasta hoy, el SUV medio ha sido el modelo más vendido de la firma premium francesa pero dado el aumento de competidores y a cada vez mayor rivalidad que hay, era ya hora de que se renovara. Así es pues como os traemos hoy al nuevo DS 7 que ahora pierde el apellido de Crossback e introduce interesantes e importantes novedades, sobre todo a nivel mecánico con la llegada de una versión híbrida enchufable mucho más potente que es la misma que protagoniza esta prueba de El Periódico de la Energía y de la que te vamos a descubrir todas sus características.

Fino estilismo

Al tratarse de la típica actualización de mitad de vida comercial, las principales características se centran en el diseño. Mide por tanto lo mismo, 4,59 metros de largo por 1,89 de ancho y 1,62 metros de alto convirtiéndose en una alternativa a rivales de corte premium como el Audi Q3, el BMW X1 (prueba), el Mercedes-Benz GLA o el Volvo XC40 por citar algunos de los más destacados.

Entre sus novedades estéticas están un renovado frontal con una calandra más grande y elegante secundada ahora por unas luces de conducción diurna verticales rasgadas y que se convierten en la seña de identidad de los nuevos modelos, pues ya las vimos en el DS 4 (prueba), así como por unos faros principales que suman la tecnología DS Pixel LED Vision 3.0 con proyección matricial adaptativa y selectiva.

Un portón trasero completamente nuevo con ópticas más finas y sensación de tridimensionalidad que se unen bajo una moldura en la que se incrusta el nombre de la marca. Llantas de 18 a 21 pulgadas con diseños exclusivos para cada acabado y motorización o el acabado Performance Line que ha sido desarrollado específicamente por la división deportiva de la marca y que se distingue visualmente del resto de integrantes de la gama por el logo de DS Performance en capó y portón así como por las molduras en negro de los marcos de las ventanillas, las barras de techo.

Prêt-à-porter

En el interior se mantiene la altísima sensación de calidad con un puesto de conducción rematado con materiales de primer nivel, como el cuero Alcantara que viste tanto la parte alta del salpicadero como los paneles de las puertas o lo asientos que en este acabado tienen un ligero corte deportivo. El resto de elementos mantiene su disposición con unos pocos intuitivos elevalunas situados en el túnel central o la doble pantalla de 12 pulgadas, una destinada al cuadro de instrumentos y otra al sistema multimedia.

Aquí es donde nos detenemos porque si bien la primera mantiene sus múltiples menús, me ha parecido que es de las más sencillas de manejar dentro del Grupo Stellantis, y eso que ya hemos visto unas cuantas como por ejemplo la del Opel Astra PHEV (prueba). Respecto a la central, mantiene su tamaño pero ahora introduce un nuevo sistema multimedia, más rápido e intuitivo segmentado por widgets que nos dan un acceso sencillo a los menús. En el caso de la versión phev tenemos la opción de visualizar pantallas exclusivas del sistema como el diagrama de energía, los datos de consumo o la programación de la carga, sin obviar el e-SAVE.  Lo que sigue sin gustarme, no obstante, es que tengamos que manejar el climatizador a través de la misma.

Fuertemente equipado

Para aumentar la sensación de lujo y confort, DS pone a nuestra disposición una serie de packs entre los que destacan el Confort que suma asientos y parabrisas calefactables o cargador inalámbrico, el Acces con apertura eléctrica del portón o el Viaje Performance Line+ con techo panorámico practicable, climatización automática bizona también para las plazas traseras, cristales traseros tintados, acústicos y laminados o siempre llamativo Reloj central firmado por BRM Chronographes y motorizado.

La guinda la ponen tanto un sistema de sonido Premium firmado por FOCAL ELECTRA como un sistema de visión nocturna tan impropio en el segmento como útil si viajas de noche a la que se suma la cámara de 360º idónea para aparcar. Eso sí todos estos elementos elevan la cuantía de tu coche en 6.100 euros.

Por último no hay cambios respecto a la habitabilidad y el DS 7 mantiene una zona trasera apta para tres adultos, con un buen confort de marcha en todas sus cotas, mientras que el volumen del maletero asciende a 555 litros, siendo común a todas las motorizaciones, incluidas las phev que, como te hemos dicho, suman un nuevo integrante.

Rápido y eficiente pero ¿merece la pena?

Una inédita alternativa phev que es justo el que tenemos entre manos como te comentábamos al principio y que se coloca en la cúspide de la gama. Hablamos del E-TENSE 4x4 360 que, como te puedes imaginar, suma un rendimiento conjunto de 360 CV fruto de combinar un motor de gasolina de 200 CV con dos eléctricos situados en ambos ejes de 110 y 113 CV, siendo el trasero el que mueve al conjunto cuando elegimos el modo Electric. En esencia es la misma configuración que el E-TENSE de 300 CV pero con los pertinentes cambios en la gestión y recuperación, es capaz de sumar otros 60 CV. Con ello conseguimos una mejor aceleración rebajando el dato de 0 a 100 km/h en tres décimas, hasta los 5,6 segundos.

El par máximo es común en ambos pues alcanza los 520 Nm mientras que la punta también es idéntica, 235 km/h por lo que la elección entre uno y otro se nos antoja un tanto complicada. El encargado de gestionarlo es una caja de cambios automática de 8 relaciones que funciona particularmente bien mientras que el conductor tiene a su disposición varios modos de conducción siendo especialmente destacable el Confort, exclusivo de la marca DS.

Aquí es donde trabaja el sistema DS Active Scan que se incluye en todas las versiones PHEV y que no son sino unos amortiguadores controlados por una cámara que ajusta cada rueda de forma independiente en función de las imperfecciones de la calzada. El resultado es una pisada casi perfecta, al nivel de una alfombra voladora. Porque el confort de marcha es excepcional, digno de un modelo Premium como este aunque siempre que hablemos de vías rápidas, porque este DS 7 está pensado para devorar kilómetros y no tanto para salir a una carretera revirada, donde comportándose bien, es más tosco.

Y eso que este acabado DS Performance Line+ suma un chasis específico, rebajado 15 mm en altura y con unas vías 24 y 10 mm más anchas en la zona delantera y trasera. A ello se suma un equipo de frenos más grande, con 380 mm de diámetro y pinzas de cuatro pistones firmadas por DS Performance que mejoran la mordida, sobre todo en el primer recorrido.

Ahora bien, hablamos de un phev y aquí hay que centrarse en el entramado eléctrico. Ya te hemos comentado que en marcha es el motor trasero el que mueve las ruedas con una solvencia destacada. La novedad viene también de la mano de la batería pues ha aumentado ligeramente su capacidad pasando de los 13,2 a los 14,2 kWh lo que le ha permitido a la marca homologar hasta 65 km, aunque en este motor de 360 km se queda en 57 km. Dicho esto, en conducción real nosotros hemos sido capaces de cubrir 50 km, alternando mucha ciudad con carretera abierta.

La ventaja de este PHEV es que podemos seguir cargándolo en tomas de 7,4 kW lo que implica esperar solo 2 horas para llenarlo al 100%. En casa, en una noche lo tendrás igualmente lleno. Y si no tienes a mano un punto de carga y lo necesitas tener lleno cuando llegues a una ZBE, lo puedes recargar en marcha con el programa e-SAVE eligiendo la autonomía que quieras. Por cierto, siempre que circules en modo electric, se activa un LED azul en el parabrisas que informa de nuestra eficiencia.

En definitiva

Llegamos al final de esta prueba con un modelo francés que sigue la línea de las marcas alemanas de cambiar lo mínimo para mantener la esencia. Este DS 7, ya sin Crossback, es un modelo más maduro que pule las imperfecciones de su predecesor y suma una alternativa de 360 CV que, visto lo visto, no difiere mucho de la ya existente de 300 CV, más allá de costar algo más. Porque este DS 7, como buen coche Premium que es, no es apto para todos los bolsillos y aunque la gama parte de los 39.000 € en las versiones de combustión que se ciñen, ojo, exclusivamente al diésel de 130 CV pues ya no hay gasolina y que serían casi 7.000 euros menos que la primera opción PHEV, la de 225 CV que parte de los 45.800 euros.

Respecto al PHEV de 300 CV arranca en los 51.465 euros mientras que a igualdad de equipamiento, el de 360 CV es 4.550 euros más caro que el de 300 CV. Si nos ceñimos a este acabado Performance Line+, el precio del E-TENSE de 360 CV arranca en los 59.109 euros que pueden acabar siendo 66.300 euros en el caso de que optes por esta unidad en concreto, con todos los extras habidos y por haber.

Galería de imágenes del DS 7 E-TENSE 4x4 360