Las opciones de movilidad se incrementan con esta novedosa tecnología estrenada por Nissan. Recibe el nombre de e-Power y nosotros la hemos probado en el modelo que la estrenó, el Qashqai para explicarte qué es y cómo va
En 2007 Nissan sacudió los cimientos del sector lanzando la primera generación del Qashqai. Un modelo que no solo supo llegar al corazón del público general sino, simultáneamente, de convertirse en el salvador comercial de una marca en vías de extinción. Desde entonces, la historia se ha escrito sola hasta el punto de que el creador de los crossover compactos ya ha superado las 3 millones de unidades vendidas en el Viejo Continente contribuyendo además que en nuestro país se superen los 500.000 unidades de crossover de Nissan vendidas a nivel general.
Pero la vida cambia y si hace tres lustros no había rivales contra los que competir, ahora el Qashqai tiene a bien rivalizar con casi una treintena de modelos como, por ejemplo, el Renault Austral (prueba), cada uno con sus fortalezas y debilidades, provocando que las miras ya no estén centradas en él. Por eso, la diferenciación ante una rivalidad tal como la propuesta es importantísima y de ahí que Nissan haya dado una vuelta de tuerca al concepto con esta versión e-Power que hoy es protagonista en El Periódico de la Energía.
Un modelo que, como aquel primer Qashqai quiere revolucionar el segmento con una tecnología novedosa como es esta. Porque si tuviéramos que definir a este e-Power sería como la de un eléctrico de gasolina, es decir, que no es un modelo 100% eléctrico, que no es un eléctrico de autonomía extendida y, sobre todo, que no es un híbrido autorrecargable. Del mismo modo vamos a ver si merece la pena frente a los Qashqai MHEV (prueba) que ya hay en la gama porque, como ves en el parabrisas, este e-Power tiene la etiqueta ECO de la DGT y no la CERO como se podría esperar de un eléctrico. ¿Por qué? Aquí te lo contamos.
Sin cambios estéticos
Antes de entrar en materia te tenemos que decir que la versión e-Power no se diferencia prácticamente en nada frente a otro Qashqai. Por fuera se mantiene los 4,42 metros de largo siendo los logos e-Power los que nos informan del motor que llevamos. Por dentro es igual de habitable, con una zona trasera apta para adultos de 1,85 metros, unas puertas que se abren casi en 90º y unos asientos confortables que pueden incluir función masaje en el caso del conductor y copiloto. El maletero tampoco ofrece variaciones y se mueve en el entorno de los 500 litros.
Tecnológicamente también destaca tanto por el cuadro digital de 12,3 pulgadas con una información clara y bien ordenada o un head-up display proyectado en el parabrisas aunque el mayor cambio frente al resto de Qashqai fue el montaje de la nueva pantalla panorámica de 12,3 pulgadas que ya ha sido adoptada en el resto de versiones y que ofrece unos gráficos más modernos y un manejo más intuitivo.
En cuanto a los niveles de acabado, el Qashqai e-Power está disponible con todos: Acenta, N-Connecta, Tekna y el Tekna+ de esta prueba y que cuesta 42.000 euros y que entre algunos elementos distintivos de equipamiento trae llantas de 20”, techo panorámico practicable, sistema de Sonido BOSE con 10 altavoces, cámara 360º, asientos delanteros eléctricos y Nissan Connect Services.
Si estás pensando cuánto más caro es frente a los microhíbridos te decimos que a igualdad de equipamiento cuesta 5.600 euros más que el de 142 CV (que por cierto no puede montar el acabado Tekna+) y 2.450 euros más que el de 158 CV con tracción 4x2, pues con el 4x4 es microhíbrido es 300 euros más caro.
Así es la tecnología Nissan e-Power
Tras este repaso, toca entrar en detalle y saber por qué este Qashqai tiene el sello ECO en lugar del CERO que os decía. Porque aquí debajo se combinan dos motores, uno eléctrico de 190 CV y 330 Nm de par que es el encargado de mover a las ruedas en todo momento y que se alimenta de la energía almacenada en una batería de 2,1 kWh situada bajo los asientos delanteros.
Como ves, una capacidad reducida para tratarse de un eléctrico por lo que necesita algo que la recargue en movimiento. Y aquí es donde entra en juego el bloque de gasolina 1.5 Turbo de tres cilindros que desarrolla 155 CV para accionar directamente un generador que es el encargado de suministrar energía a dicha batería. Lo más interesante de este bloque es que puede variar la relación de compresión para así adaptar mejor el rendimiento en función de si necesitamos prestaciones o consumo pasando del 8:1 al 14:1, respectivamente. Pero lo que te tiene que quedar claro es que en ningún momento este motor es el que mueve las ruedas.
Nissan e-Power: lo conducimos
Ahora bien, la teoría está muy bien pero, ¿cómo se comporta en marcha? Pues el hecho de que este Qashqai tenga la etiqueta ECO es porque aunque sea el motor eléctrico el que mueve las ruedas delanteras, tenemos un tubo de escape que emite 120 gr/k de CO2 y homologa un consumo de 5,3 l/100 km. Valor este que es se sencillo de lograr si abusas mucho del entorno urbano. De lo contrario te estarás moviendo como nosotros en los 5,9 l/100 km lo que unido a los 55 litros de depósito de combustible te dará para rodar cerca más de 900 km sin problemas.
“"El motor de gasolina actúa como generador de energía pero en ningún caso es el encargado de mover las ruedas"
El motor térmico no gira a régimen estacionario, sino que éste varía y, sin una caja de cambios como tal el incremento o disminución del ruido del motor térmico varía sólo según se aumenta o desciende la aceleración. Es perceptible para que el conductor tenga una sensación natural que acompaña a la presión del acelerador, aunque está atenuado por un sistema de cancelación activo de ruido que trabaja con el equipo de sonido. Es más agradable que el de los MHEV con CVT pero en las fases de mayor demanda de aceleración puede acabar siendo molesto.
Entonces, si no es un eléctrico, ¿es un híbrido? Más o menos porque sí podemos movernos en modo exclusivamente eléctrico pulsando el botón EV o siendo muy genitales con el acelerador. Nosotros hemos llegado a superar los 100 km/h sin emitir pero entonces la autonomía en este tipo de conducción no ha pasado los 2 km. Nissan nos dice que puede llegar a ser hasta de 5 km con condiciones favorables pero nosotros lo máximo que hemos logrado son 3,5 km, siempre y cuando no aumentáramos la presión del acelerador momento en el que el motor de combustión entra en funcionamiento de nuevo. Este es el principal motivo de por qué no tiene el sello CERO, porque la autonomía en modo 100% eléctrico es escasa.
Ahora bien, para hacernos ver que es un eléctrico, este Qashqai e-Power tiene no solo el modo B de retención sino también la función e-Pedal para realizar una conducción de un solo pedal ya que incluso se enciende la luz de freno trasera. Dicho esto, tenemos unas prestaciones tirando a correctas con un 0 a 100 km/h de 7,9 segundos y una velocidad máxima de 170 km que no son para tirar cohetes. Pero con lo que te tienes que quedar es con la suavidad de marcha, con el confort de a bordo y con el bajo consumo que puedes llegar a conseguir. No tiene la inmediatez de un eléctrico ni el total silencio, pero satisface bastante nuestras necesidades de transporte.
En definitiva
Entonces, ¿es recomendable comprarse este Qashqai e-Power por delante de los microhíbridos? Si buscas etiqueta, la respuesta es NO por la diferencia de precio ya comentada; pero si quieres liar a tus vecinos y familiares con la revolucionaria tecnología que ofrece, no lo dudes, ve a por él.
Fuera de bromas, lo cierto es que esta tecnología destaca por lo ya comentado en marcha: suavidad y consumo porque conseguir cubrir casi 900 km con un depósito son valores más propios de los diésel que de los gasolina y ya no digamos de los eléctricos. Quizá Nissan debería luchar por que este tipo de modelos tuviera una etiqueta propia pero en los tiempos que corren de cambios, mejor será acogerse al dicho de ‘virgencita, que me quede como estoy” y centrar el sello CERO en los Leaf y Ariya (prueba) y demás alternativas cero emisiones que ofrece.
Es un sistema ridículo. Quemar gasolina para mover un motor eléctrico, que es el que hace girar las ruedas. Nissan tiene el Ariya que es 100% eléctrico y es mucho más rentable a la larga. Y con las bajadas de precios que se prevén para los próximos dos años lo será aún más. Mi consejo: seguir estirando tu coche y esperar a 2025/26 para cambiarlo.
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Antonio
23/12/2023