Movilidad

Sobran baterías y faltan coches eléctricos: la burbuja que amenaza el mercado

La industria global de baterías para coches eléctricos se encamina hacia un exceso de capacidad que podría triplicar la demanda de aquí a 2030, con Norteamérica como uno de los focos principales de este posible “boom” sobredimensionado

1 comentario publicado

En los últimos años, los grandes grupos automovilísticos se han metido de lleno en una carrera por asegurarse el suministro de baterías, levantando gigafactorías a toda prisa con la vista puesta en un crecimiento exponencial del coche eléctrico. Sin embargo, las proyecciones más recientes apuntan a que el sector ha pisado demasiado el acelerador: la capacidad instalada en baterías podría ser tres veces superior a la demanda mundial de vehículos eléctricos en 2030. ​

Este desajuste no es un matiz técnico, sino un riesgo económico de primer orden para fabricantes de automóviles, proveedores de celdas y administraciones que han comprometido miles de millones en ayudas públicas y préstamos blandos. El desequilibrio se percibe con especial claridad en Norteamérica, donde los proyectos anunciados en la “era del entusiasmo” están llegando ahora a la realidad de una demanda que crece, pero bastante menos de lo previsto. ​

El aviso de AlixPartners y el papel de China

Depositphotos

Detrás de las alarmas por esta sobrecapacidad está, entre otros, el análisis de AlixPartners y los datos compilados por Nikkei, que apuntan a ese desajuste global de aquí a final de década. Parte de ese exceso vendrá, claramente, de China, que ha levantado una red de plantas muy por delante de otras regiones, tanto para abastecer a su mercado interno como para exportar. ​

La CE quiere movilizar 1.800 millones para producir baterías de coches eléctricos en la UE
La mandataria ha avanzado que la Comisión propondrá una ley de aceleración industrial para sectores y tecnologías estratégicos clave.

Para Estados Unidos, Japón y Europa, el mensaje es incómodo: al mismo tiempo que intentan levantar su propia cadena de valor para reducir dependencia de Asia, se enfrentan a un mercado en el que “faltan coches y sobran baterías”. Esta combinación obliga a replantear calendarios, volúmenes y estrategias de alianzas, porque ya no se trata solo de construir fábricas, sino de garantizar clientes estables y diversificar hacia almacenamiento estacionario u otros usos. ​

La problemática de Ford y General Motors

Ford está trabajando en diferentes tipos de baterías.Ford

Ford se ha convertido en uno de los símbolos de este giro de guion. La compañía fue de las que más fuerte apostó por una cadena de suministro propia en EE UU, con la joint venture BlueOval SK junto a SK On y varios proyectos de plantas en Kentucky y Tennessee impulsados por un crédito de 9.200 millones de dólares del Departamento de Energía. ​

Hoy, esa apuesta se revisa a la baja: Ford ha recortado un 35% la capacidad de baterías inicialmente prevista y ha decidido abrir parte de la producción a terceros para no infrautilizar sus instalaciones. A esto se suma la decisión de detener indefinidamente la producción de la pick-up eléctrica F-150 Lightning en Norteamérica, lastrada por un mercado menos receptivo de lo esperado y por la desaparición del crédito fiscal federal para la compra de vehículos eléctricos. ​

Fabrica de GM.GM

General Motors también está ajustando el tiro en plena transición hacia el vehículo eléctrico. La empresa y su socio LG Energy Solution han anunciado paradas temporales en sus plantas de celdas de Ohio y Tennessee, que se traducirán en unos 1.550 despidos entre recortes indefinidos y suspensiones temporales.  ​

Madera y corcho para las baterías de coches eléctricos: la manera de aumentar su seguridad y sostenibilidad
Usar madera combinada con acero y corcho no solo es más sostenible, sino que también mejora la seguridad y resistencia de las baterías.

GM justifica estos movimientos por una “adopción más lenta de lo previsto” y por un entorno regulatorio cambiante, una forma elegante de reconocer que el negocio eléctrico no está siguiendo la curva de crecimiento que sustentaba sus planes de capacidad. La compañía ha reducido turnos en factorías clave y revisa inversiones a la luz de un escenario en el que el motor de combustión mantiene más protagonismo del anticipado, al menos en el corto plazo. ​

Panasonic, Tesla y los proyectos cancelados

Panasonic

El frenazo no solo afecta a fabricantes de coches, también a suministradores como Panasonic. El grupo japonés puso en marcha en julio una nueva fábrica de baterías en Kansas, pensada en buena parte para abastecer a Tesla en Norteamérica, pero ha dejado en el aire la fecha en la que alcanzará el ritmo de producción inicialmente previsto para el año fiscal 2026. ​

CATL da con la clave para conseguir baterías de coches eléctricos más duraderas
Si bien todavía son una incógnita, el mayor fabricante de baterías del mundo podría haber solucionado el problema de los paquetes de metal de litio.

La combinación de una demanda de Tesla más débil en la región y un entorno de incentivos menos favorable obliga a reescalar el proyecto y a gestionar un arranque más gradual. En paralelo, otras iniciativas directamente se han quedado por el camino: T1 Energy, por ejemplo, ha decidido cancelar el plan de levantar una planta de baterías en Georgia ante el cambio de expectativas del mercado. ​

¿Qué implica el exceso de baterías?

La 'blade 'battery' de BYD supera una prueba de perforación de la batería y aguanta más de 300 grados.BYD

Un escenario en el que sobran baterías y faltan pedidos abre varios frentes. Por un lado, presiona a la baja los márgenes de fabricantes de celdas y obliga a buscar salidas alternativas, como el almacenamiento estacionario, aplicaciones industriales o acuerdos de suministro fuera del automóvil. Por otro, puede dificultar el retorno de las grandes inversiones públicas y privadas ya comprometidas en gigafactorías, especialmente en regiones que llegan tarde y con costes más altos que Asia. ​

Las baterías de los coches eléctricos son duraderas, este es el escaso porcentaje que pierden cada año
Según el último análisis realizado por Arval demuestra que en el ciclo de garantía de la batería, esta solo se degrada hasta un 85% de su capacidad.

Para los grupos automovilísticos, el riesgo es doble: se enfrentan a activos que pueden quedar infrautilizados y a la vez a una transición energética que no se detiene, con Europa y China manteniendo objetivos ambiciosos de electrificación y restricciones crecientes al motor de combustión. A medio plazo, la sobrecapacidad también puede desencadenar una guerra de precios en baterías, beneficiando a los fabricantes de vehículos que consigan posicionarse con volúmenes altos y costes contenidos. ​

La gigafactoría de TeslaTesla

La situación en Norteamérica ofrece varias lecciones que deberían observar con atención los responsables de la política industrial europea. La primera es que la planificación de capacidad en baterías tiene que ir de la mano de señales regulatorias estables y de una hoja de ruta clara en objetivos de penetración del coche eléctrico, para evitar oscilaciones bruscas que desincentiven la inversión o generen burbujas de oferta. ​

Vuelve a confirmarse: las baterías de los coches eléctricos son más longevas de lo que se pensaba
Un estudio realizado a más de 1.300 coches eléctricos usados en Suecia muestra que el 80% conserva el 90% o más de la capacidad original de sus baterías.

La segunda es que la diversificación de usos para la batería (movilidad, red eléctrica, autoconsumo, almacenamiento de renovables) será clave para absorber picos de capacidad si la demanda de vehículos no acompaña al ritmo previsto. Y la tercera, quizá la más evidente, es que el coche eléctrico no vive aislado: depende de incentivos, infraestructura de recarga, precios de la energía y confianza del consumidor, de modo que una estrategia coherente debe alinear todos estos vectores si se quiere evitar que las gigafactorías de hoy se conviertan en activos varados mañana.

Noticias relacionadas

Un comentario

  • galan

    galan

    26/11/2025

    Sobran baterías y faltan coches eléctricos. Segun en que pais o zona.

    Que en EEUU pase esto, era de esperar, desde que que llego la administracion Trump, hubo una apuesta total al petroleo-gasolina y trabas a todo lo que fuera transporte electrico.

    Pero, no podemos decir lo mismo de Europa, y mucho menos de China, Corea del Sur, India, y algunos paises mas de Asia.
    China controla el 80% de fabricacion y ventas de baterias de transporte electrico por carretera.
    Pero, hay tambien otros paises como Corea de Sur, Japon, Vietnam, Taiwan etc.

    Decir que sobran baterías y faltan coches eléctrico, es actualmente, muy perjudicial para una Europa que por fin se esta poniendo al dia en construciones e instalaciones de gigafabricas de baterias.
    Yo diria que en Europa es al reves, faltan baterias para la demanda de coches electricos que hay.
    Hemos visto varias veces que las fabricas europeas, se han quedado paradas sin poder producir coches electricos, por falta siministro de baterias del gigante chino.

    Y luego esta la cantidad de baterias que se fabrican para estacionario.

    Cuando de verdad arranquen las ventas de coches electricos, con las nuevas baterias que conseguiran 800,900, y mas de 1.000 kms de autonomia, creo que va a haber mucha falta de baterias.

    El tiempo dira si me equivoco. Creo que no.














Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios

Este sitio web está protegido por reCAPTCHA y la Política de privacidad y Términos de servicio de Google aplican.