Vuelve a confirmarse: las baterías de los coches eléctricos son más longevas de lo que se pensaba
Un estudio realizado a más de 1.300 coches eléctricos usados en Suecia muestra que el 80% conserva el 90% o más de la capacidad original de sus baterías
En poco menos de una década, la evolución sufrida por los coches eléctricos ha sido exponencial. De ser un mar de críticas a convertirse en una realidad y, claro está, a ser la tecnología que domine las carreteras europeas de aquí a la próxima década. Muchas han sido y están siendo las barreras que se han sorteado: autonomía, potencias de carga y fiabilidad adherido, en este caso, a la degradación de las baterías.
Y es que un estudio reciente elaborado en Suecia, en el que se han analizado más de 1.300 coches eléctricos e híbridos enchufables de segunda mano, revela que ocho de cada diez mantienen más del 90% de la capacidad de su batería original, un dato que desafía el concepto común de que las baterías se degradan rápidamente con el tiempo y el uso.
Este hallazgo tiene un impacto directo sobre la percepción y el mercado de vehículos eléctricos usados, posicionándolos como una opción fiable y económica, ya que una batería saludable garantiza autonomía y rendimiento estables, favoreciendo la confianza de terceros compradores.
Los que menos pierden
El EV6 de Kia es el que menos degradación ofreció.K.S.
Este rendimiento sobresaliente responde a tecnologías avanzadas desarrolladas para gestionar la temperatura de las celdas, optimizar la carga y minimizar el envejecimiento prematuro, haciendo que la batería se mantenga funcional durante años sin deterioro significativo, incluso después de superar los 200.000 kilómetros en algunos casos.
Cómo aumentar la vida útil de la batería
Se recomienda no abusar de la carga rápida. Depositphotos
Más allá de la marca o modelo, los hábitos del usuario y las condiciones ambientales juegan un papel crucial en la vida útil de la batería. El estudio hace especial énfasis en la importancia del control térmico, la gestión inteligente del software y la forma de carga como pilares fundamentales para prolongar su vida. Evitar temperaturas extremas, limitar la carga rápida y mantener el nivel de batería entre un rango óptimo son algunas de las claves para ralentizar la degradación.
Por ejemplo, se recomienda cargar el vehículo regularmente entre el 20% y el 80%, dejando la carga completa solo para viajes largos y evitando que el coche quede estacionado por tiempos prolongados ni con carga excesivamente baja o alta. También es esencial aprovechar funciones como el pre-acondicionamiento térmico para proteger la batería cuando las condiciones climáticas son adversas.
Evitar bajar del 10% para cargarlo en casa. Wallbox
Tampoco se recomienda dejar el coche estacionado con niveles bajo el 10% o cerca del 100% por períodos largos, mientras que es aconsejable estacionarlo en lugares con temperatura controlada. Un detalle que parece nimio pero que ayuda, y mucho, es mantener el software actualizado para optimizar la gestión energética y evitar desgaste innecesario. Por último, es conveniente realizar ciclos completos de carga de vez en cuando para calibrar el sistema. Este enfoque no solo alarga la vida de la batería, sino que también contribuye a una conducción más eficiente y segura, aumentando la autonomía real y minimizando costes de mantenimiento.
Beneficios medioambientales y económicos
Todo esto beneficia a la hora de comprar un coche de segunda mano.
Una batería bien conservada reduce la necesidad de reemplazos tempranos, lo que se traduce en un menor impacto ambiental, porque disminuye la demanda de materiales críticos como el litio y el cobalto. Además, al extender la vida útil del coche eléctrico, se maximiza la inversión económica del usuario y se promueve una movilidad más sostenible y responsable.
De esta forma, el uso adecuado de baterías no solo mejora la experiencia del conductor, sino que también contribuye a reducir la huella ecológica del transporte, posicionando a la movilidad eléctrica como una de las opciones más eficientes y duraderas del futuro.
Las limitaciones de crecimiento actuales de los VE, viene por el precio final donde la batería es el 40 % del valor, el tiempo de carga y la autonomía.
Analizando el transporte eléctrico pesado por carretera, surgió la idea de separar la batería en tres o más y cargarlas con tres mangueras a la vez para reducir el tiempo de carga.
Demasiado simple para que la industria de automoción no haya utilizado está vía.
Una respuesta técnica sería de utilidad.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios
Sol Mediterráneo
11/11/2025