Llega la democratización eléctrica: ¿qué marcas han bajado el precio de sus modelos?

A buen seguro que estás familiarizado con el refrán “cuanto las barbas de tu vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar”, porque es básicamente lo que han hecho algunos fabricantes de coches eléctricos. Y es que tras la bajada de precio efectuada hace algunos meses por Tesla en sus dos principales modelos: el Model 3 y el Model Y, circunstancia que fue duramente criticada por Carlos Tavares, CEO de Stellantis, algunos de los que se consideran sus principales rivales han decidido coger el mismo camino que la firma californiana.

El caso más llamativo es quizá el de Volkswagen. La marca alemana no ha obtenido el éxito deseado con la familia eléctrica ID, principalmente con el ID.3, al que llegó a definir como el Golf del siglo XXI. La escasa calidad percibida, un detalle que se ha paliado con esta última actualización unida sobre todo a unas tarifas quizá demasiado elevadas, han acabado por repercutir en sus ventas. Pero esto es algo que ahora quieren revertir con una fuerte rebaja de precios, concretamente de hasta 7.000 euros en el caso del ID.3 con batería de mayor capacidad (77 kWh), costando ahora 41.720 euros frente a los 48.640 euros de antes.

Más barato que un gasolina

Pero ojo, porque si hablamos de la versión de acceso, es decir, la de batería de 58 kWh, puede ser tuya por menos de 40.000 euros, en concreto por 38.530 euros, lo que implica una rebaja de 4.210 euros frente a hace algunos días. Si a este precio le aplicamos además la bonificación del Plan Moves III que pude ser hasta de 7.000 euros, estaríamos hablando de un ID.3 por 31.530 euros, es decir, que sería 855 euros más barato que un Golf gasolina de 110 CV con nivel de equipamiento básico.

Ahora bien, el ID.3 no es el único Volkswagen que se beneficia de esta bajada, pues los ID.4 (prueba) e ID.5 (prueba del GTX) también son más económicos que antes. El primero cuesta ahora casi 6.000 euros menos, partiendo de los 48.010 euros, mientras que el ID.5 parte de los 51.510 euros, lo que supone casi 5.000 euros menos que antes. Pese a estas rebajas, ninguno de ellos llega al nivel del Tesla Model Y, que actualmente parte de los 42.990 euros en nuestro país.

Otros eléctricos que bajan su precio

El caso de Volkswagen no es particular pues hay otros fabricantes que han seguido la misma línea que Tesla. Hablamos en este caso de BYD, que ha bajado en 6.000 euros el precio de su Atto 3 (prueba) arrancando ahora en los 35.990 euros, lo que implica un descuento de 2.000 euros frente a cuando nosotros lo condujimos por primera vez, logrando así romper la barrera de los 30.000 euros cuando aplicamos el Moves III. La misma senda ha tomado MG pues el fabricante chino, el único que consigue seguir la estela de los Tesla en el segmento eléctrico, ha recortado también en 2.000 euros el precio de sus principales modelos. Así, de los 30.690 euros que parte por ejemplo el MG4 Electric, se queda en 16.480 euros con todas las promociones y ayudas gubernamentales. Por su parte, el MG ZS EV se queda en 20.480 euros, el MG5 Electric, en 23.280 euros y el Marvel R, en 30.980 euros.

A ellos se unen igualmente firmas como CUPRA que ha reducido el precio del Born (prueba) con batería de 58 kWh en más de 3.000 euros, hasta los 34.990 euros, y del de 77 kWh en casi 5.000 euros, partiendo de los 38.010 euros; o Subaru con el Solterra (contacto), que ahora cuesta 6.000 euros menos frente al precio de finales de 2023, iniciándose en los 50.750 euros. También es notorio el caso de KIA y Hyundai que también han sucumbido a esta rebaja de precios y aunque de momento la primera ha confirmado que el e-Niro (prueba del Niro PHEV) ya está por debajo de los 40.000 euros gracias a la reducción de 4.600 euros, la segunda ha bajado la tarifa de algunos de sus modelos cero emisiones en su país.

En definitiva, si bien el precio era considerado como un gran impedimento a la hora de adquirir un vehículo eléctrico, con esta rebaja en las tarifas de algunos modelos el usuario podría ver con mejores ojos e incluso llegar pensar ya en adquirir uno de estos vehículos por delante de los de combustión, ayudando así a impulsar unas ventas que si bien van mejorando mes a mes, todavía están por debajo de las estimaciones deseables. Eso sí, el primer paso ya está dado.