La firma española de carga sigue sus planes de expansión poniendo, como hasta ahora, el foco en el usuario.
Ha sido la acción que peor se ha comportado en el año dentro del sector petrolero europeo. Su participación en Orsted no ha ayudado mucho.
Un debate en el que se mezclan argumentos técnicos y percepciones sobre el modelo político y económico chino, mientras cada actor del sector energético evalúa los riesgos desde su propia posición en plena transición europea.